Viedma. El Gobierno de Río Negro recibió la autorización del Ministerio de Economía de la Nación para instrumentar la fase final del Fideicomiso Financiero y de Administración con el Banco de la Nación Argentina, que permitirá refinanciar definitivamente las deudas históricas de un importante grupo de productores primarios.
Luego de más de un año de trabajo en conjunto entre las distintas áreas del Poder Ejecutivo, en particular el Ministerio de Economía y el Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca, junto al senador nacional Miguel Pichetto y el Poder Legislativo, se logró absorber y refinanciar la deuda de más de 110 productores (en su mayoría del sector frutícola), por más 33 millones de pesos.
De este modo, el Gobierno de Río Negro pone punto final a veinte largos años de incertidumbre y exclusión del sistema financiero para estos productores que, además, vuelven a ser sujetos de crédito para el desarrollo de su actividad productiva y beneficiarios con la suspensión de las acciones judiciales oportunamente iniciadas por la entidad financiera.
Fue por tal fin que se sancionó la Ley 4.779 que conformó la Comisión Especial de Evaluación y Seguimiento del Convenio y cuya actividad fue el análisis, estudio y determinación de los créditos que serían transferidos.
La actual gestión lleva invertido más de 142 millones de pesos en el apuntalamiento de la producción frutícola provincial apostando a mantener el circuito productivo ya que es un firme compromiso del Gobierno Provincial.
Frutos secos y heladas
El productor de frutos secos del Valle Inferior, Alejandro Arancio, indicó que “la producción de nueces en la Colonia es muy buena, se puede comercializar en nichos muy exigentes”, pero lo que hace imprevisible a veces el resultado de esta producción “son las heladas tardías”.
Indicó no obstante a la agencia APP que ahora han podido acceder a unos créditos, que antes estaban concentrados en el Alto Valle, con Río Negro Fiduciaria, “para la defensa de heladas a través de la compra de equipos de riego bajo copa, se moja abajo y esto evita que la helada suba a la parte aérea, donde está la producción”.
Arancio, quien posee 30 hectáreas de nogales, explicó que “con excepción de los años en que afectan las heladas, fenómeno que se ha acentuado en los últimos años, la calidad de la cosecha es excepcional; nuestras nueces tienen una pulpa muy blanca, con lo cual nos colocamos en los mejores nichos de Buenos Aires para vender nueces”.
Informó que en todo el Valle Inferior hay más de 500 hectáreas de nueces y otras 500 hectáreas de avellanos, es decir unas 1.000 hectáreas, una de las principales producciones de frutos secos de la provincia y el país. “La avellana es el único lugar donde se produce en el país”, destacó.
Expresó a la agencia APP que no es un tema menor el de las heladas, porque si uno interrumpe su relación con el mercado un año, luego cuesta recuperar esta comercialización.
Aseveró que “la helada es la única contra a nuestra producción, la que se produce después del 15 de octubre, porque es la época de la floración; si todo va bien la cosecha se realiza en abril”.
Mencionó que esta producción de nogales “ofrece mucho trabajo para la poda y la cosecha”.
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